El trastorno bipolar causa un cambio en el estado de ánimo del individuo, llevándolo de la euforia a la tristeza, sin razón ni explicación alguna, ¿qué es y qué hacer en casos de bipolaridad?
El trastorno bipolar es el nombre que le da la psiquiatría a un trastorno del ánimo de las personas. Es una variación anormal de los índices de energía y ánimo, cayendo el paciente en estados de manía, entendiéndose esto como una elevación anormal del ánimo, modificando el humor, mostrando excitación, euforia, irritabilidad, cólera, perdida de inhibición, dificultad para concentrarse, entre muchos otros.
Todo sobre el Trastorno bipolar
O en casos menos graves de hipomanía donde la alteración es menor y puede hacer a la persona más productiva, ya que su energía aumenta, sus pensamientos se hacen más rápidos y su rendimiento sube.
Estas personas pasan a su vez por periodos de depresión, oscilando así sin causa aparente entre la energía excesiva y la tristeza.
La causa de esto generalmente es un desequilibrio electroquímico en los neurotransmisores cerebrales. Padecer esta enfermedad pone en un riesgo mayor de accidentes o mortalidad a quien lo padece, ya que sus excesos de energía, pueden llevarlo a realizar actos que representan un peligro para él, o el riesgo de provocarse alguna enfermedad cardiovascular.
Existen tres tipos de bipolaridad:
- TIPO I: Experimenta episodios maníacos y depresivos.
- TIPO II: Depresión mayor, acompañada por lo menos de un evento hipomaníaco.
- TIPO III: Se presenta en pacientes mayores de 50 años, con alteración en su estado de ánimo.
En cada estado el paciente presenta los siguientes síntomas:
- Depresivo: Tristeza, culpa, desesperanza, falta de sueño y apetito, fatiga, ansiedad, cólera, soledad.
- Maníaco: Exaltación, pensamientos acelerados, autoestima alta, menor necesidad de dormir, agitación.
- Hipomanía: Es menor que la manía pero presenta los mismos síntomas, solo que el paciente puede controlarlo un poco más.